Baja reserva ovárica
El concepto de baja reserva ovárica se refiere al resultado de pruebas diagnósticas que investigan el número de folículos antrales que hay en el ovario al inicio de cada ciclo. Como todas las definiciones técnicas contiene conceptos que deben interpretarse de forma correcta para entender su significado. Vamos a intentar arrojar un poco de luz sobre esto:
FOLÍCULOS ANTRALES
Los folículos antrales son estructuras esféricas o semiesféricas que se encuentran en el ovario y que se pueden observar mediante una ecografía que corresponden a bolsas de líquido rodeadas de células de granulosa y que habitualmente contienen un ovocito que está en condiciones de madurar. Ese número nos da una idea de cómo puede ser la respuesta del ovario cuando se le somete al estímulo de gonadotropinas (fármacos estimuladores del crecimiento folicular).
Es importante por tanto tener en cuenta que hablamos de folículos que potencialmente pueden convertirse en maduros y por tanto desarrollar un óvulo maduro.
Su determinación es importante en todos los casos en cualquier mujer en la revisión ginecológica anual, ya que puede predecir una pérdida de la fertilidad prematura en algunos casos, pero sobre todo es importante para decidir cómo tiene que ser la estimulación y el tratamiento de reproducción asistida, además de lo que podemos esperar del ovario en esas circunstancias (respuesta ovárica) No hay que confundir reserva ovárica con respuesta ovárica, aunque están relacionadas no son la misma cosa.
RESERVA OVÁRICA VS. RESPUESTA OVÁRICA
La reserva ovárica es el resultado del recuento de folículos antrales o de las determinaciones hormonales (FSH, AMH…) y la respuesta ovárica es el número de ovocitos que se obtienen tras la estimulación ovárica para un tratamiento de reproducción asistida o una criopreservación de ovocitos.
¿BAJA RESERVA OVÁRICA = POCA FERTILIDAD?
La confusión más importante es la que asocia la reserva ovárica con la fertilidad, o la capacidad de una mujer de conseguir un embarazo de forma natural. Dicho de otro modo, una mujer con baja reserva puede tener una ovulación sana todos los meses y conseguir un embarazo sin ninguna ayuda si el resto de los factores que intervienen en la fertilidad no fallan, sobre todo si esa baja reserva no va asociada a una edad reproductivamente avanzada.
Como conclusión o idea para llevar a la práctica procurad que vuestro ginecólogo haga una prueba de este tipo en la revisión periódica, la más sencilla es el recuento de folículos antrales y consultadlo con el especialista si el número está por debajo de 7-9. También se pueden hacer análisis de FSH el tercer día del ciclo o determinaciones de AMH. Esta última es cara y no la financian todas las compañías de seguro.
Para las mujeres que se encuentran en un proceso de estudio o tratamiento de reproducción asistida, seguid los consejos de vuestro médico especialista y no dudéis en consultar todas las dudas que os parezcan oportunas.
